Esta semana, durante unos días de vacaciones en familia por la provincia de Burgos, tuvimos ocasión de asistir a una misa de los monjes del Monasterio de Santo Domingo de Silos. En concreto fue la de Sexta (13:45h) y se ofició en la Iglesia Monástica de San Sebastián, donde hacen todos sus oficios diarios.

Rituales

Se trata de una iglesia muy espartana, robusta pero muy alejada de las grandes exhibiciones artísticas habituales de  las iglesias cristianas.

La misa fue toda cantada en Gregoriano y lo que me llamó la atención fue el ritual completo que siguieron, desde que fueron entrando en silencio uno por uno, hasta que salieron de la misma forma al finalizar el oficio.

No hablaron entre ellos en ningún momento, ni se dirigieron a los asistentes tampoco.

Es un ritual habitual para ellos, que repiten varias veces a diario, con distintos contenidos, cantos y lecturas.

En los bancos delanteros había unas etiquetas con las habituales recomendaciones sobre guardar silencio y otras relativas al COVID, y un código QR “para seguir la celebración”. Este código te lleva a una página en la que puedes elegir el día y el oficio para acceder al contenido del mismo.

Rituales
Rituales

Lo cierto es que cuando hablamos sobre Cultura de Empresa aparece también el concepto de rituales, sumado a otros aspectos de nuestro día a día, que compartimos entre todos los que trabajamos juntos, y que nos diferencian de otras empresas:

  • Rituales
  • Formas de hacer
  • Valores
  • Creencias
  • Comportamientos 

Como suelo explicar en los cursos de Liderazgo y Desarrollo Directivo 

“La Cultura es el sistema inmunológico de la organización”.

Es decir, nos protege de las amenazas externas.

Lo interesante es que todas las empresas tienen una Cultura, aunque no sean conscientes de ella, al igual que todos tenemos una Marca Personal, aunque no la trabajemos activamente.

Rituales

Los elementos de esta Cultura suelen diferir de aquellos que se muestran en la Web, en el apartado Cultura y Valores (si existe). La verdadera Cultura de Empresa es la que se vive en el día a día.

Las personas de nuestra organización:

  • ¿vienen a trabajar con entusiasmo?
  • ¿se las cuida?
  • ¿hay espíritu de colaboración?

Nuestra empresa:

  • ¿proporciona un entorno de trabajo eficiente o burocrático?
  • ¿el ambiente es divertivo?
  • ¿resulta acogedor o solitario?

Todo esto sucede, aunque no seamos conscientes de ello.

Otro de los aspectos destacables de la Cultura de Empresa es el concepto del éxito.

¿Qué es el éxito para la empresa?

  • ¿Se valoran solo los resultados financieros?
  • ¿El crecimiento de las personas?
  • ¿El grado de satisfacción de los empleados con su trabajo?
  • ¿El valor que como empresa aportamos a la sociedad?

También forma parte de la Cultura el nivel de tolerancia al error. 

  • ¿Permitimos que las personas se equivoquen y aprendan?
  • ¿Se señala y castiga el error?

Al final la Cultura es la suma de todos esos comportamientos, rituales y prácticas:

  • Lo que hacemos cuando algo sale bien.
  • Lo que hacemos cuando alguien se equivoca.
  • Lo que hacemos cuando una persona nueva se incorpora a la organización.

Incluso lo que hacemos el día que alguien cumple años: 

  • ¿Trae algo para invitar a los compañeros en el almuerzo? 
  • ¿Se le hace un regalo colectivo?
  • ¿Se le da el día libre?

Bueno, la reflexión empezó sobre el ritual de los monjes de Silos y se me ha ido de las manos, pero lo importante es que seamos conscientes de que todas las empresas tienen una Cultura y de que es responsabilidad de los líderes definirla y transmitirla, para evitar que sea incoherente con nuestros valores.

Como decía Peter Drucker

“La Cultura se come a la Estrategia para desayunar”.