Aunque todavía me encuentro en el mercado muchas empresas de cierto tamaño que no utilizan presupuesto anual, es fundamental que las empresas aprendan a tener una visión estratégica del presupuesto para mejorar sus resultados financieros a largo plazo. Una visión estratégica del presupuesto puede ayudarnos a maximizar los ingresos y reducir sus gastos.
Existen tres razones principales que demuestran por qué es importante para las empresas tener una visión estratégica del presupuesto en lugar de simplemente centrarse en los números:
- Un enfoque estratégico del presupuesto permite a la empresa alinear sus objetivos financieros con sus objetivos empresariales a largo plazo. En lugar de solo centrarse en los números, un enfoque estratégico del presupuesto permite a la empresa considerar los impactos a largo plazo y tomar decisiones más informadas sobre la asignación de recursos.
- Además, permite a la empresa identificar áreas de oportunidad para la inversión y la mejora continua. Al centrarse en los objetivos empresariales a largo plazo, la empresa puede identificar áreas en las que los recursos pueden ser mejor utilizados para lograr esos objetivos.
- En última instancia, una visión estratégica del presupuesto permite a la empresa tomar decisiones más informadas y efectivas que pueden mejorar la rentabilidad y el éxito a largo plazo de la empresa en lugar de simplemente centrarse en los números a corto plazo.
A —> ¿Cómo puede una empresa identificar las áreas de oportunidad para la inversión y la mejora continua?
A través del análisis financiero, la retroalimentación de los clientes, la investigación de la competencia y el análisis de los procesos internos.
1. Análisis financiero: La empresa puede realizar un análisis financiero para identificar las áreas de la empresa que están generando mayores ingresos y las que no lo están haciendo. Esto puede ayudar a identificar áreas en las que se puede invertir más para obtener mayores beneficios.
2. Encuestas y feedback de los clientes: También podemos realizar encuestas y solicitar feedback a los clientes para identificar áreas en las que la empresa puede mejorar. Esto puede ayudar a identificar oportunidades para mejorar la calidad del producto o servicio que se ofrece, lo que puede generar un mayor retorno de inversión.
3. Análisis de la competencia: Se puede realizar un análisis de la competencia para identificar las áreas en las que la competencia está superando a nuestra empresa. Esto puede ayudar a identificar oportunidades para mejorar la oferta de la empresa y mantenerse a la vanguardia en el mercado.
4. Análisis de procesos internos: El análisis de los procesos internos nos permite identificar áreas donde se pueden mejorar los procesos y aumentar la eficiencia. Esto puede ayudar a reducir los costes y aumentar la productividad.
B —> Las empresas pueden maximizar sus ingresos si tienen una visión estratégica del presupuesto
1. Identificar oportunidades de crecimiento: y asignar recursos hacia esas áreas. Esto puede incluir la introducción de nuevos productos o servicios, la expansión a nuevos mercados o la inversión en marketing y publicidad.
2. Optimizar precios: podemos analizar los precios de los productos o servicios y determinar si existen oportunidades para aumentar los precios o ajustarlos para maximizar los ingresos.
3. Reducir costes: se pueden analizar los costes y buscar maneras de reducirlos sin comprometer la calidad del producto o servicio.
4. Enfocarse en los clientes rentables: nos permite enfocar nuestros recursos en los clientes que generan mayores ingresos y beneficios.
5. Mejorar la eficiencia: en la producción y entrega de productos o servicios, lo que permite reducir los costes y aumentar los ingresos.
C —> Si ponemos el foco en la reducción de costes, una visión estratégica del presupuesto nos puede ayudar a:
1. Identificar áreas de gastos innecesarios: y tomar medidas para reducirlos. Esto puede incluir la eliminación de productos o servicios que no generan beneficios, la reducción de gastos de publicidad o la disminución de costes operativos.
2. Analizar la cadena de suministro: y buscar maneras de reducir los costes de adquisición de materias primas o bienes. Esto puede incluir buscar proveedores alternativos o negociar precios más bajos con proveedores actuales.
3. Automatizar procesos: para reducir los costes laborales. Esto puede incluir la implementación de software de automatización de procesos o la adopción de tecnologías que aumenten la eficiencia en la producción.
4. Reducir los costes de energía: como la optimización de la iluminación o la implementación de tecnologías energéticamente eficientes.
5. Mejorar la gestión de inventario: reduciendo los costes de almacenamiento y eliminando la sobrecarga de inventario.
D —> ¿Cuáles son algunos errores comunes que cometen las empresas al implementar un presupuesto estratégico?
Implementar un presupuesto estratégico puede ser un proceso desafiante para las empresas, y se pueden cometer varios errores en el camino. Estos son algunos errores comunes que las empresas deben evitar al implementar un presupuesto estratégico:
1. No alinear el presupuesto con la estrategia general: es fundamental asegurarse de que el presupuesto refleje las prioridades y objetivos de la empresa, y que sirva como herramienta para alcanzar esos objetivos.
2. Centrarse demasiado en objetivos a corto plazo: si bien es importante cumplir con los objetivos a corto plazo, es igualmente importante considerar el impacto a largo plazo de las decisiones sobre el presupuesto.
3. No involucrar a las partes clave interesadas: esto puede conducir a una falta de compromiso y apoyo para el presupuesto, lo que puede dificultar su implementación y éxito.
4. Sobrestimar los ingresos o subestimar los gastos: esto puede conducir a expectativas poco realistas y la incapacidad de alcanzar los objetivos presupuestarios.
5. No controlar ni ajustar el presupuesto: un error común es desarrollar el presupuesto y luego no controlarlo ni ajustarlo según sea necesario. Es importante revisar periódicamente el presupuesto y hacer los ajustes necesarios para garantizar que se mantenga alineado con los objetivos y prioridades de la empresa.
E —> ¿Cómo pueden las empresas asegurarse de que su presupuesto esté alineado con su estrategia general?
1. Definir los objetivos estratégicos de la empresa: deben ser claros, medibles y alineados con la misión y los valores de la empresa.
2. Determinar los recursos necesarios para alcanzar los objetivos: esto incluye identificar las iniciativas, proyectos y programas clave que apoyarán los objetivos estratégicos.
3. Desarrollar un plan presupuestario: alineado con los objetivos estratégicos. Esto incluye la asignación de recursos a las iniciativas, proyectos y programas clave que apoyarán los objetivos estratégicos.
4. Revisar y ajustar el plan presupuestario: de forma periódica y ajustarse según sea necesario para garantizar que permanezca alineado con los objetivos estratégicos de la empresa. Monitorizando el progreso hacia los objetivos y haciendo ajustes al plan presupuestario según sea necesario.
5. Comunicar el plan presupuestario: a todas las partes relevantes interesadas, incluidos empleados, inversores y clientes. Esto ayuda a garantizar que todos entiendan los objetivos estratégicos de la empresa y los recursos necesarios para alcanzarlos.
Con el objetivo de mantener el foco en la importancia del presupuesto a largo plazo, podemos definir una serie de indicadores que nos ayuden a identificar desviaciones y aplicar medidas correctoras.
F —> Indicadores clave (KPI) – Todas las siglas corresponden a los nombres originales en inglés.
1. Coste de adquisición del cliente (CAC): tiene en cuenta todos los costes asociados con la adquisición de un nuevo cliente, como los gastos de marketing y ventas, divididos por la cantidad de nuevos clientes adquiridos dentro de un período de tiempo específico. Al monitorizar el CAC, las empresas pueden asegurarse de no gastar demasiado en la adquisición de clientes y pueden ajustar sus estrategias de marketing y ventas según sea necesario.
Por ejemplo, si el CAC de una empresa está aumentando, puede ser una indicación de que sus estrategias de marketing o ventas no son tan efectivas como antes. En respuesta, es posible que la empresa deba cambiar su enfoque de marketing a un nuevo público objetivo o invertir en nuevos canales de ventas para reducir el CAC.
2. Valor de por vida del cliente (CLV): este KPI mide la cantidad total de ingresos que una empresa puede esperar generar de un solo cliente en el transcurso de su relación con la empresa. Al monitorizar CLV, las empresas pueden determinar cuánto pueden gastar para adquirir y retener clientes.
3. Margen de beneficio bruto (GPM): este KPI mide el porcentaje de ingresos que queda después de deducir el coste de los bienes vendidos. Al monitorizar GPM, las empresas pueden determinar la rentabilidad de sus productos o servicios y hacer los ajustes necesarios.
4. Retorno de la inversión (ROI): al medir el retorno de la inversión en un proyecto o iniciativa en particular podemos determinar si la inversión está generando un rendimiento positivo y hacer los ajustes necesarios.
5. Rotación de inventario: este KPI mide a qué velocidad puede una empresa vender su inventario y nos permite asegurarnos de no retener un exceso de inventario que podría bloquear el flujo de efectivo y generar ineficiencias.
6. Tasa de rotación de empleados: para conocer el porcentaje de empleados que dejan la empresa durante un período de tiempo específico. Esto nos indica lo bien que estamos reteniendo a los empleados e identificar áreas de mejora.
Las empresas tienen una gran oportunidad de mejora si adoptan una visión estratégica de presupuestos, fomentando una cultura de planificación y estrategia en sus finanzas.