Muchas empresas encuentran grandes dificultades a la hora de llevar a cabo, con éxito, la implantación de un Sistema de Gestión Empresarial (ERP, CRM, BI, etc.).

Uno de los factores clave de éxito es que exista la figura del Director de Proyecto.  Este profesional puede ser interno o externo, pero tiene que cumplir una serie de requisitos para llevar a cabo su función, que no es otra que la de garantizar la buena marcha del Proyecto:

1. Acceso directo a la Dirección de la Organización.
2. Reconocimiento y respeto del equipo directivo.
3. Conocimientos y experiencia, tanto en el ámbito de la Gestión Empresarial como de las TIC.
4. Buena relación con la empresa implantadora.

Entre sus funciones, destacan:

1. Planificación del Proyecto.
2. Auditoría interna de la empresa (o supervisión de la misma, si se subcontrata) para conocer los requerimientos del Proyecto.
3. Documentar las distintas alternativas existentes y valorarlas, de acuerdo con las necesidades de la empresa.
4. Presentar a la Dirección la propuesta o propuestas finales, convenientemente argumentadas.
5. Coordinar el «planning» de desarrollo, con la empresa responsable de la implantación.
6. Resolver las dudas que surjan durante el proceso, ejerciendo su función de intermediación entre la empresa y el partner.
7. Priorizar las distintas acciones a llevar a cabo, consensuándolas con la Dirección.
8. Velar por el cumplimiento de los planes de trabajo y del calendario de implantación.
9. Detectar desviaciones de lo proyectado y propiciar su resolución.
10. Garantizar el éxito de todo el proceso.

Desde el punto de vista de la empresa, el Director de Proyecto aporta confianza, seguridad y garantía de cumplimiento de los objetivos, al encargarse directamente de la supervisión del Proyecto.

Desde el punto de vista de la empresa implantadora, aporta claridad de ideas, objetivos claros y bien definidos y una única figura por parte de la empresa para resolver las dudas y tomar las decisiones necesarias durante la ejecución del Proyecto.

Es evidente que el Director de Proyecto por sí solo no puede conseguir el éxito del mismo, pero su ausencia suele ser una garantía de fracaso, en la mayor parte de las ocasiones.

Saludos.
Francisco Páez